lunes, 3 de marzo de 2008

¡Es que no nos tienen paciencia!

Se me cae la cara de vergüenza con nuestros hermanos presidentes vecinos de Ecuador y Venezuela. Se me escapan las palabras para demostrar el dolor y la pena que embargan mi corazón en estos momentos, la muerte de un amigo siempre es un suceso indescriptiblemente triste.



El camarada Alias Raúl Reyes falleció en medio de un ataque vil y miserable del ejército colombiano que lo persiguió hasta el Ecuador más allá de los límites de nuestras fronteras, ¡y el pobre estaba no más vacacionando en la paradisiaca jungla del norte ecuatoriano! ¡Cuánta injusticia! ¡Cuánto dolor! ¡Cuánta falta de honor la del ejército colombiano que se atreve a bombardear a semejante personalidad!



Sabrán disculparnos, es que a nosotros nos controlan los principios del capitalismo y el imperio, ¡nos hace falta instrucción! Nos hace falta aprendizaje para parecernos más a ustedes y procurar una sociedad más justa, ¡Qué importa el arroz! ¡Qué importa la leche! ¡Qué importa la libre expresión! Necesitamos ayuda para encaminarnos.



Qué vergüenza con ustedes que nuestra ignorancia y falta de sentido común nos cierren los ojos y nos impidan ver el trasfondo de la lucha de tantos años del camarada Reyes que finaliza tristemente aplastado por las bombas del imperio. Qué vergüenza entender los niños y las mujeres y los miles de colombianos asesinados como terrorismo y no como la lucha revolucionaria por la libertad del pueblo que en realidad es. Qué tristeza que mi Colombia viva negando a sus héroes y marchando en contra de ellos porque estamos inmersos en la ignorancia, no somos más que títeres de Bush.



Disculpe usted presidente Correa, en realidad no fue nuestra intención, creíamos que estábamos de nuestro lado del continente, nos pelamos por par de metros mal contados, si tan solo pudiéramos devolver el tiempo y bombardear algunos caseríos de gente pobre en el putumayo, hubiéramos puesto nuestro granito de arena por la revolución. Pero no, irrumpimos en su país y atacamos a sus invitados, ¡no cabe el perdón ni las disculpas! A mí no me gustaría que entren a mi casa unos vecinos y maten a palazos a algún buen amigo, yo haría lo mismo que usted. ¡Estoy INDIGNADO!



Disculpe usted presidente Chávez, que aunque no entiendo por qué está enojado, si comprendo su tristeza y su dolor, y de todo corazón le digo que lo comparto, ese Reyes era un buen muchacho, un guerrero de décadas, ¡y además estaba soltando a los secuestrados! ¿Qué haremos ahora? Por favor presidente Chávez, interceda de nuevo y dígale a piedad Córdoba que se saque a otros cuatro secuestrados de una de sus fincas, mire que eso haría feliz a muchas familias.



¡Qué cagada ola! Qué pena con esa gente que tanto lo apoya a uno pa´ que vengamos y le matemos a su amigo y además del otro lado de la frontera. Ahora están putos y vienen a montarnos la guerra. Es que nos tienen paciencia. Yo recuerdo que cuando venía para Venezuela en la frontera había un cuento reciente de unos activos de la guardia nacional venezolana que se metieron a Colombia echando bala, eso sí, legítimamente, porque estaban persiguiendo a unos guajiros que traían comida de contrabando. El ejército colombiano los detuvo, pero eso nunca fue motivo de guerra. Y aunque seamos ignorantes, pa´ nosotros los malos son los de las FARC, y así como nos dicen que respetemos la soberanía de los demás países, pues por lo menos no deberían dejar entrar a nuestros “malos” en sus tierras benditas, así nos evitamos líos todos. Visionaria la decisión de Correa y Chávez de enviar tropas a las fronteras, son un par de tipos inteligentes, no son esclavos ni lacayos ni cachorros de nadie.



¡Qué cagada ola! En serio que qué cagada. Ahora se nos viene una guerra, lo más triste es que como es obvio nuestro deshonroso ejército colombiano la va a ganar porque lleva 50 años en guerra mientras que en Venezuela el ejército se dedica a cuidar las filas de Mercal y en Ecuador sirven no más que pa´ cuidar a sus amigos de las FARC. Qué pena con los presidentes que les vamos a dejar los países vueltos mierda. Ojalá y no toque, me devastaría, no podría dormir por el cargo de conciencia.

Bueno pero ya en serio. A la mierda con Chávez y Correa, al primero no se le hizo nada, está es dolido porque se lo mama a tirofijo y al segundo hay que preguntarle es que carajos hacen campamentos de las FARC en Ecuador, que no vengan a joder que ellos no están limpios. Que se entró a Ecuador y se bombardeó, pues sí, que pena, de verdad, que pena que tengamos que entrar a matar a los malandros a los países vecinos que los quieren tanto. La gravedad de bombardear a criminales en otras tierras es la misma que la de darles cabida y ayuda a terroristas, Colombia tiene la culpa de 17 muertos, todos guerrilleros, Chávez y Correa están empezando a tener la culpa de muchos miles de muertos más, todos inocentes.
Ludwig

2 comentarios:

K. Dabaje dijo...

Si, en verdad que que cagada con esa gente, y hoy vi, que además de causarle dolor por la muerte de sus amigos, resulta que ahora andamos traficando polvo blanco a nuestros hermanos venezolanos, no hay derecho!!! No hay derecho, que pa' comer pan, haya que traficar harina de trigo, y Chávez queriendo salvarnos a nosotros.

Que vaina la de Chávez de buscar la paja en el ojo ajeno!!

"¡Hipócrita! saca primero la viga de tu propio ojo, y entonces verás bien para sacar la paja del ojo de tu hermano."

Julie dijo...

Difícil la situación que están viviendo uds., más difícil la situación que han puesto sus países vecinos con el tema. Aunque encuentro casi sin sentido el involucramiento de Chávez en ese asunto. Como siempre Chávez metiendo sus narices donde ni siquiera le importa. O quizás le importa para que su pueblo se olvide de la miseria cotidiana en que vive. Porque los ciudadanos venezolanos si están viviendo la miseria y más que nada, una miseria social y política donde sus gobernantes están en el lugar donde no deberían estar.

Yo pienso que cada quien con su país y quizás optar por un poco de hermandad no le hace mal a nadie. Porque en sí las guerras ya son una enfermedad patológica que destruye más a la gente común que al gobernante. También cada país tiene lo suyo y estos países no se dan cuenta tampoco de lo bueno que tiene cada país. Sin embargo, ojalá cambie toda ese tema de los secuestros y exporten sólo la imagen que tienen de su país, los paisajes, los lugares de Colombia, su comida. Yo estuve en Colombia hace 3 años y tengo buenos recuerdos de ahí. Me trataron muy bien, por eso lo digo.

Saludos, cuidate mucho. Y muy buenas entradas, por supuesto me encantó la del mundo en 40 años. Muy estadística y científica también.

Julie